Las autoridades en Buriatia, Rusia, descubrieron una operación móvil de minería de criptomonedas que robaba electricidad ilegalmente de una estación de energía. La instalación, encontrada en un camión, presenta riesgos de seguridad y agota los recursos locales, lo que ha llevado a exigir regulaciones más estrictas sobre criptomonedas.